Un «error técnico» en la reciente Ley de Paridad ha eliminado, sin querer, la protección contra el despido para empleados que solicitan o disfrutan de adaptación de jornada laboral para la conciliación familiar.

Esta omisión, que afecta a un derecho previamente blindado en el Estatuto de los Trabajadores, ha abierto la puerta a despidos que, antes, habrían sido considerados nulos.

Ahora, jueces y abogados avisan que los despidos ligados a este derecho no tendrán el mismo nivel de protección legal, creando un vacío jurídico que preocupa tanto a empleados como a empresarios.

Y surge el problema

El problema surge de la implementación de la Ley de Paridad en agosto de 2024, una ley con el objetivo de garantizar la representación igualitaria en los órganos de dirección de empresas y promover la igualdad entre géneros en el ámbito laboral.

Sin embargo, durante su redacción, se cometió un error al eliminar de la ley la protección contra el despido de los trabajadores que soliciten una adaptación de su jornada para la conciliación de la vida laboral y familiar, un derecho consagrado en el artículo 34.8 del Estatuto de los Trabajadores.

La adaptación de jornada permite que un trabajador pueda ajustar sus horarios para atender responsabilidades familiares, sin necesidad de reducir sus horas trabajadas.

Previamente, cualquier despido de una persona que solicitara esta medida se consideraba nulo, lo que obligaba a la empresa a readmitir al empleado y pagarle los salarios dejados de percibir.

Sin embargo, tras la entrada en vigor de la nueva ley, los jueces ahora podrán considerar estos despidos como improcedentes, lo que no conlleva la readmisión automática, sino solo una indemnización económica.

Contexto del error en la Ley de Paridad

Este fallo se deriva de la combinación de varias leyes aprobadas recientemente.

En 2023, el Ministerio de Igualdad y el Ministerio de Trabajo reforzaron la protección frente al despido de aquellos empleados que solicitaban la adaptación de su jornada, colocándolos bajo el paraguas de las medidas de conciliación familiar.

Sin embargo, cuando la Ley de Paridad fue aprobada en 2024, se basó en un texto anterior a esta reforma y, por error, no incluyó este colectivo entre los grupos protegidos por la nulidad automática del despido.

El Gobierno ha reconocido el fallo y lo ha calificado de un «error técnico» que se subsanará lo antes posible.

Sin embargo, el daño ya está hecho, y hasta que se rectifique, los trabajadores que soliciten la adaptación de su jornada estarán desprotegidos frente a un despido.

Consecuencias del error en la Ley de Paridad

Este error podría tener graves consecuencias, ya que se ha eliminado una de las protecciones más importantes para los empleados que buscan conciliar su vida laboral y familiar.

Ahora, los despidos que se realicen por esta razón serán considerados improcedentes, lo que permite a la empresa elegir entre readmitir al trabajador o pagar una indemnización.

Esta situación puede generar un aumento en los despidos relacionados con solicitudes de adaptación de jornada, especialmente en empresas que ven estos cambios como problemáticos o inconvenientes.

Además, la inseguridad jurídica provocada por este fallo puede tener un impacto negativo en los derechos laborales en general, debilitando la confianza de los empleados en el sistema legal y aumentando las demandas judiciales para proteger sus derechos.

Algunos expertos en derecho laboral han señalado que este fallo podría incluso incrementar el número de despidos, ya que muchas empresas podrían aprovechar la oportunidad antes de que se corrija la legislación.

Soluciones propuestas para el error en la Ley de Paridad

El Gobierno ha prometido corregir el error en cuanto se reinicie la actividad parlamentaria, lo que podría tomar varios meses debido a los tiempos legislativos.

Mientras tanto, muchos empleados que ya han solicitado la adaptación de su jornada, o están considerando hacerlo, se encuentran en una situación de incertidumbre.

Los abogados especializados en derecho laboral han señalado que algunos trabajadores están acelerando sus solicitudes de jornada adaptada para asegurarse de que están cubiertos por la normativa antes de cualquier despido potencial.

Hasta que se corrija la ley, es probable que se produzca una oleada de litigios laborales relacionados con este tema, en los que los trabajadores alegarán discriminación por haber solicitado la adaptación de su jornada, buscando que los tribunales anulen los despidos en base a otros principios legales, como el derecho a la no discriminación o el derecho a la conciliación familiar​.

Conclusión Un error en la Ley de Paridad permite el despido de empleados con jornada adaptada: ¿Una protección eliminada por descuido?

Este error en la Ley de Paridad evidencia los problemas que pueden surgir cuando las leyes se redactan de forma precipitada o sin la suficiente revisión técnica.

Aunque el objetivo del Gobierno era avanzar en la igualdad y la conciliación laboral, el resultado ha sido un paso atrás para los derechos de los trabajadores que buscan adaptar su jornada.

En ocasiones, situaciones como estas sirven como recordatorio de la importancia de legislar con rigor.

Los errores, aunque indeseados, pueden ser una oportunidad para revisar y mejorar las normativas, siempre y cuando se actúe rápidamente para enmendar las deficiencias y evitar consecuencias indeseadas.