La propuesta del Gobierno del nuevo sistema de cotizaciones de los autónomos tendrá importantes mejoras en las pensiones del colectivo

El reciente sistema de cotizaciones para los trabajadores por cuenta propia presentado por el Gobierno a los agentes sociales, supone una serie de modificaciones en el cálculo de las pensiones, que algunos califican como un proceso inequitativo.

La medida en la que los autónomos van empezar a cotizar en función de sus ingresos reales, supone una serie de ventajas para el colectivo, entre ellas, la mejora de manera sustancial de las pensiones en la mayoría de casos. Esto sucede al ajustar las cuota mensual de los trabajadores por cuenta propia a sus ingresos, sin embargo, el cambio puede transformarse en una fuente de iniquidad para el sistema de jubilaciones.

Según el Grupo de Investigación en Pensiones y Protección Social, de ponerse en marcha el plan del Gobierno, en el que se prevé trece tramos de cotización distintos, puede darse el siguiente caso:

Comparando, por circunstancias generales en 2032, un individuo del régimen general cotizando 3.763,9 euros y uno del régimen de autónomos cotizando 3.300 euros, ambos con la actual base mínima de 13.300 euros anuales, obtendrán la misma pensión para una misma carrera laboral y edad de jubilación.

De igual manera, esto sucede si la base mínima fuera de 22.000 euros anuales, donde las cotizaciones del régimen general y en el régimen de autónomos comprenden una mayor diferencia: cotizarían 6.226 y 3.660 euros respectivamente, y sin embargo, obtendrían la misma pensión.

Las pensiones se igualan debido a que el calculo de esta se realiza sobre la base reguladora declarada, y no sobre el volumen de cotizaciones realizadas, algo que muchos consideran que rompe con el principio de contributividad.

La modificación da lugar a inequidades 

De esta manera, se destaca, en un reciente estudio del Instituto Santalucía acerca de los cambios en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos, la reforma propuesta en base a la modificación del sistema de pensiones, valorando de forma positiva la consideración de los rendimientos fiscales como base de cotización.

Sin embargo, los expertos también hacen nombramiento de los efectos negativos de la reforma. «También tiene elementos muy negativos, entre los que destaca que haya tipos de cotización implícitos diferentes según los rendimientos fiscales, lo que da lugar a inequidades», advierten los autores del estudio.

Por otro lado, se tiene en cuenta la futura descompensación entre la proporción de las aportaciones y las futuras prestaciones percibidas entre el propio colectivo.»Si nos centramos en las cuotas a pagar en 2032, podemos realizar otro estudio para analizar las inequidades dentro del propio sistema de autónomos» señalan los expertos.

Es por eso por lo que, sin ir más lejos, los trabajadores por cuenta propia con bases intermedias, obtendrán una mejor pensión en relación con lo cotizado, en comparación con los autónomos con bases bajas o altas.

En conclusión, los expertos advierten que las inequidades, las cuales surgen con el régimen general e incluso entre autónomos, significan una ruptura del estatus actual en cuanto a la unificación del tipo de cotización por regímenes.

«Esta modificación va a dar lugar a inequidades, rompiendo el principio de contributividad porque en España el cálculo de la pensión de jubilación no depende del tipo de cotización, sino de las bases de cotización», concluyen el grupo de expertos.